¡Creo en El Salvador!
Semanas atrás he confirmado lo que había estado sospechando desde hace algunos años. Es que en El Salvador y en Latinoamérica no estamos nada mal. He tenido la oportunidad de participar de dos importantísimos foros de juventud que se llevaron a cabo en nuestro país. Estos eventos que no tienen precedentes en la historia. Éstos fueron la “Campus Party Iberoamérica” y “Espacio Centroamérica y Caribe”. Pocos jóvenes tuvimos la dicha de asistir a uno de estos eventos, y somos aun menos los que tuvimos la fortuna de estar presentes en ambos.
Hubo similitudes y diferencias entre ambos eventos. La “Campus”, trató de juventud, robótica, computación extrema, Internet, astronomía, ocio digital, blogs, software libre, publicidad, educación, educación y educación. Mientras que “Espacio” fue juventud, economía, política, medios de comunicación, periodismo, integración, cultura, ocio, educación, educación y educación. Más que diferencias, fueron temas complementarios que coincidían en: estar conscientes del pasado, actuar en el presente y tener visión de futuro. Las similitudes creo que están más que claras.
El evento “Campus Party Iberoamérica” reunió a cerca de 600 jóvenes de todo Iberoamérica, en el Polideportivo de Ciudad Merliot, en una verdadera fiesta de Internet. Cada participante con una computadora, conociendo personas, intercambiando conocimientos y creando futuro. Estuvimos en nuestras mesas, trabajando por tres días en proyectos de inclusión digital en la región, software libre, unión iberoamericana, entre tantos otros. Este evento se llevó a cabo paralelamente y formaba parte vital de la Cumbre Iberoamericana que se celebraba en el Centro de Convenciones de San Salvador.
Al igual que en la Cumbre Iberoamericana, en la “Campus” desfilaron todo tipo de personalidades, pero aquí quizá un poco mas diversas aun. La Reina de España, duques, primeras damas, presidentes, empresarios, maestras, estudiantes de escuelas públicas, estudiantes universitarios, empleados, monjas, visionarios, pastores, genios, matemáticos, creativos, artistas, viejos, jóvenes, niños y hasta piratas cibernéticos. Fue una verdadera experiencia poder platicar con todas estas personas y en casa.
En la “Campus” participé en un grupo denominado “Campus Crea”, el cual me llamó la atención, semanas antes del evento debido a que por mis estudios y trabajos profesionales encontré interesante desarrollar una “campaña de sensibilización para cerrar la brecha digital en Iberoamérica”. No fue casualidad entonces, que para el tercer día del evento, cuando los 6 grupos de trabajo ya habíamos presentado las propuestas creativas al Secretario General de Iberoamérica, viera en las noticias que el día anterior, el presidente de México había dicho: “… debemos sensibilizar a la población para cerrar la brecha digital en Iberoamérica…” Esa petición de un presidente, estaba siendo desarrollada simultáneamente por nuestros grupos interdisciplinarios e internacionales de “campuseros”. Ese es el poder de la juventud, quien sin esperar nada de regreso, y con la esperanza de generar un cambio, trabajamos por el bien común. Naturalmente se darán a conocer los objetivos cumplidos y los planes concretos gestados en este mega taller.
El evento “Espacio Centroamérica Caribe” se llevó a cabo dos semanas después, en el Centro de Convenciones de San Salvador. Tuve la dicha de poder asistir a los tres días de exposiciones, talleres, debates, foros y demás actividades que aquí se llevaron a cabo. Otra cantidad de personalidades se dieron cita en San Salvador. En “Espacio” conocimos periodistas de primer nivel, escritores, ingenieros sociales, políticos, empresarios, jóvenes, presidentes, artistas, sociólogos, economistas, estrategas, viejos, bailarines, gordos, universitarios, abogados y flacos. Las conferencias y talleres que en estos tres días se llevaron a cabo fueron impresionantes. En un altísimo porcentaje las preguntas fueron mas aplaudidas que las respuestas y la mayoría si que supieron contestarlas bien.
Muchas cosas fueron recogidas por los medios de comunicación pero para mí hubieron dos cosas que fueron de inmedible importancia. La primera fue la ineludible pasión del centroamericano por una real integración del istmo. Y la segunda, mas importante para los Salvadoreños fue un simbólico gesto no oficial de paz social.
La primera no es cosa nueva. Siglos llevamos queriendo unirnos para ser mas ante el mundo. Y es el momento de hacerlo, abrir nuestras cajas, cortar nuestras cadenas, darnos la manos entre hermanos centroamericanos y gritar al mundo “SOY CENTROAMÉRICA”.
La segunda no es fácil de explicar, pues llevamos ya dieciséis años desde que en un castillo, en México se firmaran unos acuerdos de paz para El Salvador. Y que mucho se ha mencionado la tal “paz social”. En 1992 se legalizaron muchas aspiraciones de un país pero el resto ha estado en nuestras manos y muchos no nos hemos dado cuenta. La paz social no se logrará con la firma de unos papeles en un castillo, tampoco con que un asesino sea perdonado por los familiares de la víctima. Tampoco se logrará cuando políticos se pongan de acuerdo, ni cuando un patrón de el tiempo de vacaciones merecido a sus empleados, ni cuando dejen de sacar notas amarillistas en la prensa nacional e internacional. La paz social se logrará cuando cada uno de nosotros sepamos amar al prójimo como a nosotros mismos. Cuando sepamos respetar a los demás, cuando podamos dialogar cualquier problema en nuestra casa, pasaje, colonia, pueblo, departamento o país por mas grande que sea. Y fue en este “Espacio” en dónde presenciamos cosas que nunca se habían visto en El Salvador. La prensa, los políticos, los empresarios, los escritores, los educadores cuestionados todos por los jóvenes. Las preguntas fueron mas aplaudidas que las respuestas, como dije antes, pero es que vale la pena repetirlo porque fue cierto. Se repitió también muchas veces una célebre frase: “El respeto al derecho ajeno… es la paz”. Está en nuestras manos.
¡Yo creo en Centroamérica! Hay algo que nos define como “latinos” en el mundo moderno. Somos una fusión específica, una que lleva muy poco tiempo desarrollándose, apenas algo más de 500 años. Existen heridas que fueron creadas en el camino, heridas que desde un principio no se pudieron subsanar adecuadamente. Hubo peleas entre colonizadores y nativos, entre diferentes regiones, unas y otras naciones e incluso, en la mayoría de territorios, peleas dentro de un mismo país.
Debido a retrasos económicos, políticos y sociales, se nos ha hecho creer en Latinoamérica por siglos que somos una región sub-desarrollada. Pero resulta que en muchos aspectos si estamos desarrollados, en muchísimas cosas si somos de “primer mundo”… tenemos lo más poderoso que pueda tener un pueblo, una población con espíritu joven, optimista, futurista y con pasión por la vida… todos estamos empezando a darnos cuenta. Pobre (subdesarrollado) es aquel que con todo lo que tiene desea mas y mas y vive infeliz. Rico (desarrollado) es aquel que con lo que tiene es feliz y no necesita más para vivir.
Conquistemos al mundo siendo Salvadoreños de corazón. Con nuestro amor, nuestra pasión, nuestro espíritu, nuestras familias, nuestros amigos, nuestro trabajo, nuestra sonrisa, nuestros volcanes, nuestras playas, nuestras montañas, nuestras ciudades, nuestros pueblos, nuestros amaneceres, nuestras escuelas, nuestro arte, nuestra gastronomía, nuestras costumbres, en fin… nuestra cultura.
No podría terminar sin tocar el tema de la crisis. ¡Que crisis! Si queremos llamar a la situación actual de la humanidad “crisis” entonces se debe al exceso de egoísmo y falta de amor en el ser humano actual. Solo hace falta ver que sociedades han sido las más duramente afectadas.
San Salvador, tarde del 23 de noviembre de 2008.
¡Creo en El Salvador!
2 comments:
en mi opinión creo que lo que nos esta destruyendo es la indiferencia o mejor dicho nos estamos auto-destruyendo... preo también creo que los Salvadoreños somos lo que somos (cahimbones) porque nos cuestan las cosas y los que tienen hijos podrán darme la razón ¿adonde termina el juguete que le regalas a un niño? tirado.... y ¿porque le divierte mas la caja en la que viene? pues porque le "cuesta" abrirla...
lo que quiero decir con esto es que de alguna forma es bueno encontrar y obtener las cosas con cierto grado de dificultad... aunque muchas veces parece que ese "cierto grado" esta casi en los limites de lo imposible... pero por eso digo que somos cachimbones, porque nos esmeramos y nos rompemos el lomo para salir adelante y mas sorprendente aun es ver cuando en las noticias muestran algunas tomas de tragedias (por ejemplo las inundaciones) y ves como el salvadoreño no ve la inundación sino una gran piscina para aventarse un par de clavados.... claro que esto es después de haber ayudado al vecino.... solamente
Me parece una excelente entrada, que bueno que tuviste la oportunidad de ir a estos dos congresos!!! Hubiera querido enterarme... Yo también creo en los centroamericanos y mucho más en los salvadoreños, tenemos enorme talento, el punto está en dejarnos de habladurías y perder el tiempo y ponernos a hacer algo, ser motores generadores de buenas ideas y más que eso convertirnos en expertos implementándolas, un gusto leerte Luis Diego, regresaré a visitar.
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